Viva el espíritu europeo

Tras su victoria: la medallista de plata Elisa di Francisca sostiene la bandera de la Unión Europea

Queridos atletas de la Unión Europea: ¡Qué gran fiesta del deporte hemos vivido! En estas últimas dos semanas, en los Juegos Olímpicos de Río, habéis conseguido grandes logros, aunque también habéis tenido que aceptar amargas derrotas. Nosotros, como espectadores, contemplamos con admiración y respeto vuestro entusiasmo por los deportes que amáis. Por supuesto, habéis luchado en primera línea por vuestras naciones, soportado gran sufrimiento, derramado lágrimas (a veces de alegría) y agitado con orgullo vuestras banderas. Pero, además, habéis lanzado una señal de la indudable fortaleza y diversidad de Europa.

La Unión Europea como vencedora en los Juegos Habéis conseguido 291 medallas en Río, 96 de ellas de oro, otras 96 de plata y 99 de bronce. Estas cifras se pueden contemplar en el “EU Medal Tracker” que la agencia berlinesa Euro-Informationen ha elaborado. A pesar de que la Comisión y el Parlamento Europeo se encuentran entre los clientes de esta agencia, la Unión Europea no se ha interesado por este medallero ficticio de manera oficial. Los diseñadores del medallero consideran que no sería justo comparar las medallas de la Unión Europea con las conseguidas por otro país, pues la primera aporta deportistas de 28 países diferentes. Por eso, argumentan, la probabilidad de conseguir una medalla es mayor. Sin embargo, Europa también se sitúa en la cúspide en comparación con otros continentes: 377 medallas por parte del continente europeo, seguidas de las 223 medallas asiáticas y de las 180 preseas conseguidas por atletas americanos. Juego sucio de Reino Unido Las críticas hacia este divertido y más bien utópico proyecto no se hicieron esperar, especialmente por parte de Reino Unido. La campaña “Leave EU”, por ejemplo, alababa los esfuerzos de muchos atletas británicos bajo el titular “We may be small, but we truly are Great Britain!”. Bajo el tono humorístico, había un mensaje firme: no necesitamos la Unión Europea, ni en economía, ni en política, ni tampoco en el deporte. Pero no todos los deportistas británicos estuvieron de acuerdo: por ejemplo, el ciclista Callum Skinner manifestó en Twitter su negativa a que su rostro fuera utilizado para la campaña a favor del Brexit. Éxito deportivo made in Europa Pues la realidad es bien diferente. Con vuestras carreras deportivas, desarrolladas más allá de las fronteras estatales, mostráis las ventajas de una Unión Europea en común. Algunos de vosotros no nacisteis en el país de la Unión Europea que habéis representado en los Juegos. Muchos de vosotros os habéis trasladado para proseguir vuestras carreras al lado de los más prestigiosos entrenadores. También os habéis beneficiado, por ejemplo, de los 14,7 mil millones de euros que la Unión Europea está invirtiendo desde 2014 y hasta el año 2020 en el programa Erasmus Plus, que por primera vez está promoviendo proyectos deportivos. La Unión Europea os ayuda a tener éxito, independientemente de la nación que representéis. ¿Es el espíritu únicamente olímpico? Se repite una y otra vez que el movimiento olímpico es un movimiento de paz. Es la persona la que se sitúa bajo los focos, no la nación. Lo que cuenta es su sobresaliente rendimiento, su fuerza de voluntad y el respeto por sus contrincantes. En este sentido, el movimiento olímpico también es europeo: su objetivo es un mejor entendimiento entre las naciones y las culturas, mostrar que la unión hace la fuerza. Con vuestros éxitos en Río lo habéis demostrado una vez más.